Resaca de emoción

No he querido escribir hasta ahora porque todavía estaba borracha por la emoción del envío, todavía me queda la resaca (en sentido figurado, claro está) pero ya veo todo con más claridad.

No sé si le pasa a todo el mundo la primera vez o ha sido sólo a nosotros, pero hoy después de 4 días he sido consciente de que realmente enviar el primer dossier ha sido un plot point tal como lo habíamos definido, ahora pase lo que pase, salga lo que salga, ya nunca podré pensar que no lo he intentado, que no me he dejado los cuernos, que no lo he dado todo. Ya está hecho, ya lo estoy intentando, ya estoy dejándome la piel... esto multiplicado por 9 hace que la seguridad de que va a salir acompañe a esta maravillosa sensación de "ya puedo morir tranquila" (aunque obviamente espero que ese momento tarde mucho en llegar).

Tareas para estas vacaciones: mover el dossier por aqui, hacer algunas visitas, quedar con la actriz que hemos pensado a ver si le interesa, trabajar sobre el story, visitar el bar de Valacloche... ¿Y a esto le llamo vacaciones?

Plot point

¡Pero que ganas tenía ¡#@₧&¬!! Tres días sin escribir y se me han hecho eternos. Fundamentalmente porque han aumentado sus horas, pero también porque han pasado muchas, muchas, muchas cosas que me apetecía mucho compartir.

El lunes ya fue, en general, un día intenso, pero puedo asegurar (y aseguro), que nada comparado con lo que vendría después. Arriba prontito para trabajar y acostarse sobre las 5 la mañana para hacer lo mismo al día siguiente, currar sin parar. Todo para llegar a tiempo para pedir la subvención a la Diputación General de Aragón y hemos llegado. Eso sí, que fuéramos contra-reloj no significa que no cuidemos los detalles y no hemos mandado cualquier cosa, no; hemos mandando un dossier precioso. Con imagen corporativa incluída. Con nuestra personalidad.

Hemos tenido que hacer tantas cosas durante estos dos últimos días que soy incapaz de enumerarlas, pero he de contaros que al sensación de ir cerrando capítulos, de ir eliminando cosas pendientes de la lista, era un subidón nuevo en la moral. Desesperaciones, hemos tenido varias, pero cada nuevo pasito era un impulso nuevo. Seguro que alguna vez te has sentido como yo en algunos momentos, sentada en una silla, mientras tu compi maneja el ordenador, tú ahí ayudando, pero parada, sin acividad visible, y te desesperas. Y el programa en cuestión decide tocarte las narices y encima siempre que crees haber acabado descubres algo que modificar. Y tú ahí, viéndolo todo desde la barrera.

¡Maravillosa sensación cuando por fin lo das por acabado definitivamente! Energias renovadas para afrontar la siguiente. Esta mañana tenía ganas de llorar cuando el documento ha sido pasado a pincho. Estaba terminado. Increíble coger el ejemplar por el que tanto habíamos peleado. Precioso, es lo único que lo define. Al dossier y al momento.

Increíble también el leer mi nombre en la portada, debajo del título Capital Dirigido por Marta Serrano. Guión de Javier García..

Y esas son algunas de las sensaciones que me han invadido durante el primer plot point* de nuestra carrera. A partir de hoy, definitiva y oficialmente, somos profesionales del cine.





*Punto de giro

Memoria

Hoy tengo muchas cosas que decir, pero sería muy largo, así que os dejo un extracto de la memoria que estoy escribiendo. Todavía hay que pulir algunas cosas, pero esos detalles surgen con la cabeza fría.

"Este proyecto nació hace más de un año, cuando supimos que tendríamos que hacer un corto como “proyecto fin de carrera”, si se le puede llamar así. Entonces el equipo que ahora formamos empezó a tomar forma y el proyecto, la idea, la esencia, a crecer en nuestro interior. No se trata de un trabajo para clase ni tampoco del proyecto fin de carrera, se trata de un cortometraje profesional, con todo lo que ello implica.

Empezó el curso y volvimos a reunirnos todos en Madrid, el proyecto se puso en marcha.

Miedo, es uno de los sentimientos que más estoy teniendo con todo lo que implica hacer un cortometraje. Supongo que en el caso de mis compañeros pasará lo mismo. También ilusión, mucha ilusión, que es la que permite plantarle cara a ese miedo. Ganas de trabajar, ganas de aprender, ganas de hacer, de ver, de enseñar… ganas de que esto salga adelante.

He de confesar que a veces me parece mucho más difícil de lo que nunca antes se me hubiese ocurrido, más complicado, más trabajoso, más arriesgado. Otras veces parece que todo viene rodado y que va a estar terminado en un abrir y cerrar de ojos.

El balance es positivo siempre, las ganas y la ilusión pueden al miedo, y aunque a veces parece complicado, confío en que las cosas salgan rodadas. Alguien dijo alguna vez aquello de querer es poder.

Llevamos dos meses de preparación y vamos más despacio de lo que nos gustaría, pero poco a poco, a su tiempo, las cosas van saliendo. Aunque siempre con alguna duda sobre si estará definitivamente bien, queremos hacerlo todo tan perfecto que nos cuesta darnos por satisfechos. Es natural, son las ganas…

(...)"

343

No es un corto de cine social, no es un corto de ciencia ficción, no es un drama y tampoco es una comedia. Entonces ¿qué es este corto?
Pues no sé como definirlo, está basado en un montón de mitos, está plagado de referencias mitológicas, hay muchos guiños significativos, muchos detalles que lo hacen muy interesante, un corto para expertos, para gente cultivada. También es un corto que puede entender cualquier persona. Es una historia para todos, una historia que puede gustar a todo el mundo, pero el que entienda todo lo que se dice, todo lo que se hace, lo va a disfrutar más, mucho más.
Empezamos con el mito de Prometeo, pero ahora es sólo un detalle más. También hay referencias bíblicas. También hay referencias a otro tipo de religiones... Ayer lo definiamos como biblia-ficción, puede que sea eso o puede que no. Puede que estemos inventando un nuevo género.
Como pequeña sinopsis muy poco aproximada a todo lo que es y significa, puedo decir que es un corto que cuenta la historia de un hombre que vuelve a su pueblo después de mucho tiempo para cobrar la herencia de su padre pero los acontecimientos dan un giro de 343º y nada es lo que parece. No estoy muy satisfecha con esta descripción, pero es lo único que puedo decir. Ya sabes, si cuento más, lo destripo. He contado poco y puede que parezca una historia más, pero no lo es.
Es una idea original y está contada de forma original, no es una historia del montón, de eso estoy segura, muy segura.
Todavía no sabemos como se titulará, pero 343 o trescientos cuarenta y tres o trescientoscuarentaytrés o cualquier otra combinación me parece guay, muy guay. Porque ese número, también tiene mucho significado, aunque lo delgiro de 343º sea posterior a la propuesta...

Hoy tengo pocas ganas de escribir, la verdad, pero no puedo evitar contestar al comentario que ha dejado el único lector reconocido de este blog, el primo de Tanner. Tienes razón cuando dices que hablo poco de cine y que todavía no he contado de qué va el corto, pero si te digo la verdad, no sé cómo hacerlo sin destriparlo y sin que pierda todo el atractivo. Si lo cuento bien, te lo cuento todo; si lo cuento mal, parece una tontería...
No te doy la razón en eso de que las dinámicas de grupo son poco interesantes, sobre todo teniendo en cuenta que el cine solo se puede hacer en equipo...
Como novedad respecto al corto, os puedo decir que hoy hemos estado barajando posibles títulos y hay uno que me gusta bastante...

Telepatia

4 días sin escribir, pero eso no significa que no haya estado trabajando. He hecho puente a la japonesa. En la última entrada comentaba mi exeriencia en el encuentro de CIMA y terminaba diciendo "hoy me siento más capaz que nunca", en la anterior "quizá resulte que soy directora de cine". Hoy las mezclo y digo bien claro SOY CAPAZ PORQUE SOY DIRECTORA DE CINE, ME DEDICO A ESTO, SÉ HACERLO, SOY CINEASTA.

Soy cineasta... volviendo al corto y dejando de hablar de mi... Es increíble, por segunda vez, Dani me ha contado como ideas para la realización las cosas que yo había escrito en mi cuaderno, no exactamente como es obvio, pero sí una idea muy aroximada. Pasó lo mismo con la 1ª secuencia, que está muy clara desde el principio, yo había pensado una cosa. Dani y Javi planearon algo muy parecido, aunque tengo que reconocer que su idea es mucho más guay. Hoy, Dani me estaba contando que habían estado pensando cositas, cuando le he dicho lo que había pensado yo, ¡era exactamente lo mismo! Mañana tendremos que ponerlo en común...

Creo que ya casi lo tenemos, el guión técnico ya casi está. Falta lo más complicado, pero creo que lo hemos hablado tantas veces, que le hemos dado tantas vueltas, que la secuencia estrella, el momento clave de la pelicula, nos va a salir del tirón, en el momento en que nos sentemos, saldrá. Espero que les guste cómo he planificado todo lo demás.

Casi vuelve a cundir el pánico hoy, pero ha sido una falsa alarma.

Por otro lado, Laura ya ha mandado algunas propuestas de intérpretes. Necesitamos un par de hombres guapetones (puestas a pedir...) de unos 30 años, una mujer cañón (puestos a pedir...) de unos 25, un viejo (o señor mayor), y un par de cincuentones. Si te interesa...

CIMA

Hoy he estado todo el día inmersa en el encuentro de CIMA,la verdad es que lo estoy disfrutando mucho. Como prueba he conseguido levantarme a las 9, para ir al primer panel. He perreado demasiado y he llegado tardel final de la primera ponente, pero he ido.


Es increíble porque hoy he conseguido dejar de preguntarme qué estaba haciendo yo allí, qué pensaría el resto de asistentes sobre mi presencia, hasta me he dado cuenta de que nadie más se lo estaba cuestionando y yo estaba porque tenía que estar.


Lo más interesante es que se me han planteado cosas en las que nunca había pensado, como el porcentaje de mujeres que participa en los equipos cinematográficos, la más baja, por supuesto, es dirección con un 10% pero ninguna otra cifra supera siquiera el 40%, a excepción de maquillaje, peluquería y costura con un 75%, pero claro, son cosas de chicas.


Además acudir a este encuentro me ha hecho darme cuenta de que sí tengo cierta conciencia de género y que me gusta tenerla. Me ha dado ganas de explorar este ámbito, de leer los libros de teoría feminista que ha recomendado Patricia Manrique (he tenido que preguntarle después porque había llegado a medias), de leer "Mujeres detrás de las cámaras" de María Camí, y de ver má cine hecho por mujeres, por enterarme de qué películas hacen, por ver las que ya se han hecho pero no conocía, etc. Y me ha dado rabia recordar las películas que he tenido que estudiar en la carrera casi terminada, no recuerdo a ninguna mujer en la lista de obligatorias, aunque espero equivocarme.


Todo lo que se ha contado me ha gustado y me encantaría que se celebraran los cursos que se han propuesto y poder ir a todos. También me he muerto de envidia, rodeada de tantas profesionales, con tantas cosas que aportar y yo sentada en mi butaca, pequeña, diminuta, escuchando anonadada todo cuanto se decía.


¿Y por qué cuento todo esto? Porque tiene mucho que ver con el corto, porque todo lo intentaba aplciar a este proyecto, todo intentaba comparlo, al fin y al cabo, es el único referente que puedo tener. Esto quiere decir que todavía no me he puesto a escribir mi parte, pero estos dos días (y todavía queda mañana) el corto ha crecido una barbardidad dentro de mi.


Hoy me siento más capaz que nunca.

Cerrando el círculo

Todavía no sé por qué hablé en la misma entrada de Javi y Laura, pero es que... hoy vuelvo a repetir lo que ayer, tenía que ser precisamente hoy cuando (no) me tocase (otra que) hablar de mi misma.

Precisamente hoy, coenzaba el I Encuentro Internacional de Cima "Las muejres del audiovisual ante el futuro". Me está costando una barbaridad escribir esto y no sé cuantas veces he borrado ya, pero es lo malo de hablar de una misma, que cuesta.

Digo precisamente hoy, porque después de la inauguración del congreso había un pequeño piscolabis, donde todas nosotras, mujeres del cine, podíamos disfrutar de una copa y unos deliciosos canapés mientras charábamos sobre nuestra precaria situación. Suena genial, pero para mi se ha quedado en un podíamos, porque he sido incapaz de cualquier otra cosa que no fuera parecer imbécil.

Escondida bajo el cuello de mi chaqueta, encogida, diminuta, invisible, paseaba por la recepción buscando mis agallas entre los pies de los invitados. Entonces se ha producido el momento inevitable, he tenido que llamar a Rubén, mi Rubén, para que me salvara.

Y su frase es la que me hace decir una y otra vez, que tenía que ser hoy, precisamente hoy. Cuando le he contado la situación, me ha dicho: "es un congreso de mujeres cineastas, ¿y qué coño eres tú? pues eso".

Después de esto y una copa de vino, no me ha quedado más remedio que luchar por integrarme. Algo he sacado, una entrevista con Iciar Bollain, y el sentir durante el resto del día que ese era mi sitio.

Toda esta parrafada para explicar por qué yo soy la directora, y la verdad, sigue sin estar nada claro. Quizá, porque aunuqe no tenga con qué demostrarlo, aunque a veces no me lo crea, aunque tenga miedo y me bloquee el pánico, aunuqe me cueste aceptarlo como algo natural... quizá, resulte que soy directora de cine...

(y un poco egocéntrica también, vaya texto más largo...)

La clave

¿Será una simple casualidad o una señal? Justo hoy, precisamente hoy, no ayer ni mañana, HOY, Javi me ha enviado un nuevo borrador y me ha dicho, creo que este es el definitivo. Y justo HOY, no mañana si hubiese seguido un ritmo normal y no hbiese escrito en la misma entrada algo sobre Javi y Laura, lo que decía, que justo hoy, me toca hablar de Dani.

Lo dejé para el final por algo, y es que aunque según dijo una vez no tiene un puesto de decisión, él es la pieza clave del equipo. Es como en las catedrales, cuando construyen la cúpula, todo depende de una piedra que se coloca al final y es la que soporta todo el peso de la estructura, la piedra clave (¡malditos best-sellers de novela histórica!).

Sé a ciencia cierta que no soy la única que así lo ve, porque esta conversación ya la he tenido, pero como en el resto de casos, sólo voy a decir por qué lo es para mi.

Hace ya mucho tiempo decidí que quería ser directora de cine, empecé la carrera (periodismo) con el ojo puesto en audiovisual. Cuando me cambié, lo hice con toda la ilusión del mundo y un día descubrí que podría ser periodista porque me gustaba mucho. Entonces, perdí mi vocación. Durante años (2 para ser exactos) andaba perdida, sin saber porque habia dejado la carrera que parecía la apropiada para mi. De repente, llega Dani, una mezcla entre un amigo y un compañero más. Lo ves poco, pero es tu amigo... A lo que iba, llegó Dani y me dijo tú serás la directora del corto del año que viene y de repente, mi vocación volvió, me recordó con una sola frase por qué estaba allí, porque soy asi, me reencontró conmigo misma.

Por todo eso y por mucho más, necesito a Dani en este equipo, porque es la persona que, sin saberlo, me dio las alas para creer que esto es posible.

Precisamente hoy, también, he tenido día de mantita, kleenex y música de cantautor... Es curioso, que ni siquiera en los días en los que no te apetece pensar en nada, el corto vuelva a mi cabeza una y otra vez. Empieza a ser enfermizo ¡y eso que aún no hemos empezado!

¡Con el teclado!

Y ya sólo me quedan 2, Andrea y Dani, ayudantes de dirección y muchas otras coasas. De Dani no voy a decir nada hoy, me lo reservo para la entrada de mañana, tengo que retrasar el día en que no me quede más remedio que hablar de mi, o que lo haga Rubén, que me da todavía más miedo.

Así que vamos con Andrea, de momento es ayudante de dirección, pero en realidad es la montadora, al respecto sólo diré una cosa, ¡monta con el teclado! Y es súper rápida, y le encanta, es como Tamara con su sonido, ella con sus imágenes, taca taca y taca, el vídeo está hecho. Da igual que lo que tengas que montar sea un estupidez, un trabajo o mi famoso fracaso, ella te ayuda encantada, en un momento lo tienes y mejor de lo que lo habías imaginado. En el caso del corto, lo de mejor va a estar chungo porque lo imagino perfecto, pero seguro que me sorprende.

Otra de las cosas guays de que Andrea esté en el equipo en general, en el de dirección en particular, es que cada vez que se em ocurre algo que podríamos hacer, le pregunto si se podría, se lo piensa un poco y te dice "yo se hacerlo", y si no sabe, está dispuesta a aprenderlo. Y si la idea no le convence, igualmente me explica cómo se haría y es muy guay, porque me muero de envidia por todo lo que sabe.

Y volviendo al día a día de El Corto (inglés), hoy hemos tenido reunión, como cada lunes. Ya tenemos el guión, así que ya puedo ponerme las pilas y hacer la memoria de realización para la subvención, el guión técnico para cumplir con los plazos y todas esas cosillas, que sólo de pensarlo a veces me entra vértigo, pero bueno, es lo que tiene enfrentarse con los sueños

Palabras

Terminado el repaso al equipo de producción, vamos con guión, porque también hay tela, jajaja. Javi y Laura. No sé por donde empezar con ninguno de los dos.

Por un lado está Laura, siempre con una buena idea, aportando su buen humor y la carcajada cuando son necesarios. También forma parte de "mi equipo natural", jajaja, tres años ya haciendo trabajos juntas y siempre con un resultado extraordinario.
Cuando quedamos para poner en común los argumentos que habíamos desarrollado como propuestas, llegó ella con una idea totalmente nueva y genial. No nos quedo más remedio que amarla para el resto de nuestra vida y empezar a trabajar en su idea.

Por otro lado está Javi, que moldea las palabras, las coge y fabrica frases increibles. Me gustaría transcribiros alguna de las que ha puesto en el guión, pero de momento mantendremos el secretismo. Sabe elegir las palabras apropiadas para expresar las cosas más complicadas. Nunca he trabajado antes con él, pero creo que es perfeccionista y exigente, así que sólo podemos esprar algo bueno de su trabajo.

Javi y Laura están escribiendo juntos lo que dentro de poco tiempo será nuestro corto. Y te aseguro, que nadie mejor que ellos dos. Estoy deseando leer la versión definitiva, ya falta menos.

Sonidos

Sigo con las presentaciones, para que os murais de envidia, jajaja. Aunque su papel principal no es en producción, de momento le ha tocado encargarse de algunas cosillas, así que hoy le toca el turno a Tamara, la jefa de sonido.

Para que os hagáis a la idea de como de buena es en ese asunto os voy a contar un historieta. Hace mucho, mucho tiempo, entraba yo en Radio Complutense de visita, me dirigí al estudio 102 a ver a Tamara y me la encontré delante del ordenador, toquiteando algo con el Audacity, no recuerdo la frase con exactitud, pero me dijo algo así como que era muy feliz haciendo lo que estaba haciendo, que se podría pegar toda la vida así.

Una persona que te dice lo feliz que le hace su trabajo, mientras está trabajando... sólo puede ser la mejor. Porque además de saber hacerlo, disfruta haciéndolo y no se conforma con un aceptable ni con un bien, tiene que quedar perfecto. Por ese motivo, el sonido de este, nuestro corto, no podía estar en manos de ninguna otra persona.

¿Cómo sonará este corto? A veces cierro los ojos y soy capaz de verlo, algunas escenas sueltas, normalmente de muchas maneras distintas, pero nunca consigo escucharlo, no le pongo voz a las siluetas que actúan... Suenan a mi, quizá debería pensar algún día cómo me gustaría que sonara...

Una lección de un fracaso

Hay veces que de los fracasos se saca una gran lección. Mi último fracaso es un videoclip para un amigo, él está encantado, a mi me parece un horror y le he pedido que no le diga a nadie que es cosa mia. No lo ha hecho, pero ese es otro tema.

La gran lección que me ha enseñado es, en realidad son dos, una fea y otra bonita. La fea es que, a partir de ahora, favores, ni uno. La bonita es que las cosas, en este mundo, funcionan con un buen equipo. Y que casualidad, resulta que para este corto, todavía sin nombre, tenemos un buen equipo, el mejor. Cada no tiene sus funciones y se ocupa de cumplirlas, nos ofrecemos ayuda cuando puede ser necesaria, hablamos, discutimos, nos escuchamos... Además, es que, no sé si han acertado conmigo, pero ellos son muy buenos en sus funciones. Ya os he hablado de Rubén y Paula, presentándolos como las piezas del equipo que son ante mis ojos. Hoy voy a seguir con el resto.

Empezando por Fran, también del equipo de producción. Es el serio, el realista, el que intenta mantenernos con los pies en el suelo, el que nos recuerda donde estamos y donde queremos llegar. Siempre se asegura de que lo que tratamos en las reuniones ha quedado claro para todos. Es lo opuesto a mi, el otro punto de vista. Yo tiendo a hiper positiva y él no es que sea negativo, es que siempre sale con algún incoveniente posible. Parte del no para lograr el sí. Yo parto del sí. Resulta gracioso escuchar debates entre nosotros porque ni siquiera llegando a la misma conclusión somos capaces de darnos la razón, nos falla la manera de expresarlo, jajaja.

Seguramente si hubiera tenido a Fran cuando me metí con el videoclip, el resultado hubiese sido diferente. El producto seguramente sería el mismo, pero la hostia que me di... seguramente, se habría encargado de ponerme la colchoneta, por si acaso...

Vamos a conseguirlo

Empiezo por lo último que se me ha ocurrido, como de costumbre. Esta noche he descubierto la frase con la que difinir a Paula. Ayer decía de Rubén que es la persona a la que consulto todo; añado hoy, que siempre me ha dado tranquilidad el que él lea mis cosas u opine sobre mis ideas, aunque va a dejar de funcionarme, porque siempre me dice que le gusta y es sólo producto del amor, jajaja.

Pues bien, que lo que hoy quería contar es que ya sé cual es la frase para Paula, ella me sabe manejar, pero no en el mal sentido, ella sabe cómo funciono, me comprende y es capaz de hacerme entrar en reazón cuando mi cabeza ha desvariado tanto que ya nada tiene sentido. Ella sabe frenarme, pero de la manera en que yo, muy picota, lo entiendo y paro. Es mi equipo. Y somos muy buen equipo, supongo que yo también le aportaré algo, jajaja.

Con sensaciones como esta con mi equipo (que posesivo suena esto, pero es por exigencias del guión), ¿cómo me puedo atrever a dudar a veces? No me lo merezco, porque pocas veces puedo haberme llegado a sentir así. Hasta ahora sólo os he mencionado 2 perosonas, pero todavía me quedan 6. Y cuando acabe, estareis de acuerdo conmigo en que rodeada de ellos, solo me queda sacar lo mejor de mi y a por ello.

Esto lo he pensado ahora, sobre la marcha. Pero es que esta mañana he tenido un momento metro, esos ratitos en los que voy en el metro y de repente tengo una enorme necesidad de ponerme a escribir. Así que como lo he escrito y estaba convencidisima de que eso iba a ser mi entrada de hoy, os lo transcribo:

"En los momentos de crisis es cuando se demuestra que un equipo es bueno, donde surgen las diferentes opiniones, los confictos, etc. Cuando es un buen equipo el que se enfrenta a la crisis, ésta sólo sirve para potenciar, para unir, para sacar algo que todavía no estaba a la luz y que le va a hacer brillar con más fuerza.

>>Hemos superado la primera crisis y estamos más fuertes que antes, más unidos, más seguros y más convencidos de que hay que luchar por consegurilo. Y vamos a conseguirlo."

Pues eso, que vamos a conseguirlo.

Cuando dudan los demás

En las últimas entradas, o en las primeras, lo mismo me da, he estado comentando mis miedos, mis temores, mis momentos de esto no va a salir bien y los de vamos a por todas porque vamos a comernos el mundo. Comentaba mis impresiones, la mayoría de las veces sólo compartidas con vosotros mis lectores, jajaja, con Rubén, mi pobre torturado ante cualquier duda, con Paula, con Javi...

Hoy ha llegado el momento en el que ninguno de ellos, pero parte del equipo, ha manifestado sus dudas y ¡coño, que difícil es! Perdón por la expresión, pero es que es realmente difícil animar a alguien cuando duda, cuando le entiende sperfectamente porque acabas de pasar por eso mismo, porque hasta hace 5 minutos eras tú la que no tenía nada claro, pero ahora estás en un momento de euforia, de convicción...

Uno de los problemas principales que estamos teniendo es que nos resulta imposible quedar los 9 y hablar tranquilos. Cuando no soy yo la que llega tarde, es no sé quién que no viene. De hecho, esta semana "cancelamos" nuestra habitual reunión de los lunes.

Yo hoy estoy tranquila, ahora incluso más que hace un rato. En realidad es un alivio saber que no soy la única que tiene miedo, porque significa que no soy la única que quiere que esto salga bien. Ya lo sabía, pero ahora está más confirmado...

Si llegamos o no, sólo el tiempo nos lo dirá. Como siempre (o casi siemppre), prefiero quedarme con el sí.

Estres

A decir verdad, nunca pensé que hacer un corto pudiese resultar tan estresante... He de reconocer que estoy disfrutando mucho de este proceso, pero de vez en cuando, una oleada de pánico nos invade, al principio es un ataque individual, pero poco a poco se va generalizando. Tarda exactamente lo que te cuesta comentarle a alguien lo agobiado que te sientes.

Esta tarde Rubén y Paula nos han comentado a Javi, a Tamara y a mi cuando íbamos hacia casa en el bus, el calendario que ahn establecido, las fechas en las que tenemos que entregar nuestra parte correspondiente. Agobio.

Sólo tengo 15 días para hacer el guión técnico una vez que tengamos la versión definitiva del guión literario.

Lo malo es que ya estamos a 25 de noviembre. Queremos grabar en marzo. Queremos pedir subvenciones. Queremos... muchas cosas. Y la Navidad ya está aqui. Hay qe tener en cuenta ese parón por vacaciones, hayq ue tener en cuenta que una parte de todo este proceso está en manos de funcionarios... hay que tener en cuenta la nueva información. Una subvención. Plazo de solicitud: 21 de diciembre. Hay que ponerse las pilas.

Podemos, eso lo sé. Somos capaces, y me quedo más tranquila.

Pero hay muchas cosas que hacer y no todas tienen que ver con el corto. Este año estamos en 5º, y se nota, nos piden lo que no nos han pedido en los 4 años anteriores... Podemos, queremos, somos capaces... por eso sé que lo heremos, pero a veces duele, jajaja.

Pasado el terror

Y después del momento pánico, llegó la hora de ponerse a trabajar. Ya teníamos la idea y los guionistas, Javi y Laura, manos a la obra. Los productores, Paula y Rubén, empezaron a rastrear las posibles subvenciones que podríamos conseguir, Fran planificó los pueblos que habría que visitar, Tamara empezó a buscar contratos… y entonces tuvimos la primera reunión del equipo de dirección. El lugar, mi casa; la hora, la del desayuno, almuerzo para algunos. Así que nos hicimos con un buen café, un zumo de naranja, papel y boli y un borrador del guión y nos pusimos manos a la obra. De esa mañana sólo recuerdo las ganas de asesinar a Andrea y Dani cuando me llamaron para decirme que venían y me sacaban de esta manera de la cama; y la sumamente reconfortante sensación de tiempo aprovechado y trabajo bien hecho que me quedó cuando se marcharon. Habíamos estado juntos un par de horas y habíamos resuelto en nuestras pequeñas cabezas la secuencia más difícil de todo el cortometraje. Sólo hacía falta que producción lo aprobara y meditarlo un poco más, primero asegurarnos de que somos capaces de hacerlo y después para buscar nuevas formas de complicarnos la vida. Eso sí, como salga… como esto salga bien… va a ser la… va a ser una maravilla.
Un día después Javi y Fran, por obligación, Paula, Rubén y yo por devoción, pusimos rumbo a Teruel en busca del pueblo y del bar de nuestro cinematográfico sueño. Visitamos un total de 25 pueblos en dos días, no sé cuantos kilómetros hicimos, pero pasamos más de 20 horas dentro del coche, los 5 bien apretaditos. Volvimos con dos firmes candidatos y el fin de semana mereció la pena, desde entonces sabemos que aunque me pusiera pesada proponiendo Teruel como localización, no la elegimos sólo por eso, este corto tiene que ser en esa provincia.
Allá donde íbamos sembrábamos la confusión, no sé por qué la gente entendía que estábamos grabando un documental sobre pueblos y bares, creemos que todos esperaban que sacáramos el equipo en ese mismo momento. También algunos de nuestros allegados se confundieron, a la vuelta todos hemos escuchado cómo nos preguntaban qué tal había ido el rodaje. Para qué molestarnos en explicar si quiera, que en realidad no va a ser un rodaje si no una grabación porque vamos a hacerlo en vídeo…
Así estamos a mediados de noviembre y no sé cuantas veces he visto el corto en mi cabeza, ni cuantas versiones distintas, ni cuanto he disfrutado en sueños el momento del “rodaje”.
A veces, alimentar tanto la fantasía no es bueno; a veces, es inevitable. Por eso esta tarde hemos estado “discutiendo” varias opciones para el día del estreno.

Primeras reflexiones

Lo más importante de trabajar en equipo es estar a gusto dentro del equipo, que haya un buen ambiente, que cada uno desempeñe un rol y cumpla con sus funciones y que haya un nivel de entrega equilibrado, que nadie dé más que otro para que no surjan los conflictos. Conseguir lo primero es fácil cuando trabajas rodeado de amigos, pero si cada uno no cumple con su parte, los roces aparecen pronto y las grandes broncas después, mucho peores que cuando trabajas con desconocidos.
En el caso del que voy a hablaros, aún a riesgo de precipitarme, creo que somos un gran equipo porque somos un grupo de amigos pero no nos hemos juntado exclusivamente por eso sino porque todos estamos dispuestos a dejarnos los cuernos por este proyecto y porque ya hemos trabajado antes juntos y el resultado ha sido óptimo.
Como grupo, hay un interés común que nos define, no nos conformamos con lograr un producto mediocre, queremos la excelencia, buscamos la perfección.
La primera vez que hablamos de formar este grupo fue hace ya un año, hablando sobre aquella remota fecha en que tendríamos que hacer un corto a finales del 5º curso. Para nosotros no se trata de un trabajo más para la universidad, tampoco se trata del proyecto fin de carrera, es más bien el momento de ponerse a currar, el momento para medirse las fuerzas, el momento de comprobar que todo este tiempo en la universidad ha valido la pena, si somos capaces de cumplir alguno de los sueños con que empezamos a estudiar Comunicación Audiovisual.
Y así comenzamos el gran año, el 5º curso de la carrera… Desde el primer día estuvimos fantaseando con la posibilidad de hacer un gran cortometraje, con la idea de hacer nuestra propia película. Una vez hechas las averiguaciones pertinentes, como si se podían formar grupos de 9 personas y aceptar los riesgos que ello suponía, nos pusimos a trabajar.
A partir del 15 de octubre nos hemos reunido el equipo al completo todas las semanas para contarnos como van evolucionando las cosas. Ese día cada uno asumió esa responsabilidad y se puso a trabajar en ello. A pesar de que cada uno tiene su parcela de trabajo, todos aportamos ideas y opinamos cuando se nos pregunta. Uno de los objetivos fundamentales de este proyecto es que todos lo sintamos como nuestro.
Y espero no equivocarme cuando afirmo que esto va a salir bien, cuando siento que vamos a hacer algo muy grande, porque cuando estamos reunidos y miro a mi alrededor y veo a Javi, a Fran, a Dani, a Andrea, a Laura, a Paula, a Rubén y a Tamara algo me dice que sí, que adelante, que con ellos al fin del mundo y que me he rodeado con gente que es la mejor en lo suyo. Les veo tan capaces, tan eficaces, que a veces me abruma el temor a no estar a su altura y me pregunto ¿por qué me habrán elegido a mí? Entonces me digo: porque puedo, porque quiero, porque soy capaz y porque me atrevo.